domingo, 15 de febrero de 2015

Cómo elegir un buen chocolate negro



En el artículo de hoy, queremos centrar nuestra atención en el chocolate negro, uno de los productos que se elaboran con dicho cacao, y que suele ocupar un lugar destacado en las despensas de muchos hogares. El chocolate tiene propiedades reconstituyentes, ello es debido a la presencia en su composición de distintos minerales, como hierro, fósforo, potasio y calcio, y vitaminas PP, B1 y B2, que mejoran el funcionamiento del sistema nervioso. Es notable también la presencia de polifenoles, que son sustancias naturales con grandes propiedades antioxidantes que nos protegen del envejecimiento celular así como de enfermedades degenerativas.

El problema que presenta el chocolate es que su elaboración no responde a una única fórmula. Así, según el fabricante las cantidades de manteca de cacao, cacao puro, grasas vegetales y azúcar, varían notablemente. Un chocolate negro y amargo con un porcentaje de cacao del 100%, no tiene el mismo efecto sobre nuestro cuerpo que un chocolate con un alto porcentaje de azúcar y un bajo porcentaje de cacao. Por ello, cuanto más puro es un chocolate, más sano resulta su consumo. 

Algunas de las propiedades del chocolate puro


Además de sus importantes propiedades reconstituyentes, al chocolate se le atribuye la capacidad de mejorar el estado anímico, esto se debe a su elevada concentración en minerales como el magnesio y el fósforo, y a otras sustancias que actúan sobre el sistema nervioso activándolo, como es el caso de la feniletilamina, la teobromina o la serotonina.
  • La serotonina es una sustancia que actúa contra el estrés, por lo que su consumo aporta tranquilidad.
  • La feniletilamina pertenece a la familia de las endocrinas, y es la responsable de la supuesta adicción que nos genera el chocolate. 
  • La teobromina, parecida a la cafeína, estimula el funcionamiento del corazón y el cerebro.
  • El magnesio es un gran aliado para aliviar los síntomas del síndrome premenstrual. 

Consumo de chocolate industrial


Los distintos productos elaborados con chocolate industrial pueden ser consumidos de manera moderada por personas sanas que siguen una dieta equilibrada. Sin embargo, debido a su elevado contenido en azúcares, potasio y grasas, se recomienda reducir, e incluso eliminar, su consumo en casos de colesterol alto, diabetes, sobrepeso, problemas digestivos, enfermedades renales o presencia de piedras en la vesícula biliar. 

No es oro todo lo que reluce


Cuando vayamos a comprar chocolate es aconsejable mirar la información nutricional y asegurarnos de que lleve al menos un 60% de cacao. En el caso del chocolate blanco, debemos saber que éste no tiene cacao, por eso es blanco, y los únicos ingredientes que comparte con el chocolate negro es la manteca de cacao. En el caso del chocolate con leche está elaborado con manteca de vaca y leche en polvo. Además, la normativa dictada por Europa permite que se utilice hasta un 5% de grasas de sustitución, lo que aprovecha el fabricante para abaratar sus productos sustituyendo una parte de la manteca de cacao por otras grasas más baratas e insalubles, como es el caso del aceite de karité o palma. Por tanto, insistimos en la necesidad de saber distinguir el chocolate de calidad, ya que es la opción más saludable.

Los grandes maestros chocolateros franceses están promoviendo el uso de ingredientes nobles en la elaboración del chocolate, para que se garantice que éste se elabora con manteca de cacao y con cacao puro. Algunos establecimientos van más allá,  asegurando que no han usado aroma de vainilla, si no vainilla natural, y que tampoco han incluído entre los ingredientes la lecitina de soja, obtenida a partir de soja modificada genéticamente. Dicha lecitina, usada desde hace más de 40 años, sirve para ligar todos los ingredientes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario